Proyecto Fènix, es una iniciativa de agricultura urbana para mejorar la ocupación de las personas en tratamiento de drogodependencia. La iniciativa, que también pretende romper el estigma que a menudo rodea este colectivo, se desarrolla en un CAS de Barcelona
El área de drogas de la Asociación Bienestar y Desarrollo ABD pone en marcha una iniciativa de agroecología urbana que busca mejorar la inclusión social y laboral de las personas en tratamiento de drogodependencias, así como romper el estigma que a menudo las rodea. Bajo el lema Cultivando nuevas oportunidades, el proyecto Fènix se desarrollará en el jardín del Centro de Atención y Seguimiento (CAS) de Sarriá (un espacio cedido por la Agencia de Salud Pública de Barcelona) y acompañará una quincena de personas durante este año. Igualmente, quiere convertir el espacio en un centro de participación comunitaria con entidades, empresas y personas del barrio de Sarrià- Sant Gervasi. El proyecto, cuenta también con la colaboración del Colegio de Arquitectos de Catalunya (COAC) que se encargará del arreglo de algunos espacios.
Las personas que participen en el proyecto tomarán parte de todo el proceso: desde el cultivo y mantenimiento de las plantas dentro de un modelo de jardinería forestal, hasta la organización del trabajo, la planificación económica- financiera, la promoción de los productos y su venta, etc. Todas ellas recibirán formaciones básicas alrededor de la agroecología y otras más específicas según un itinerario de inserción social personalizado para mejorar la empleabilidad. Al mismo tiempo, obtendrán experiencia en el emprendimiento social y colectivo con la comercialización de los productos. De este modo, también, pasan de ser personas en riesgo de exclusión social a personas que se auto-abastecen de alimentos producidos y mantenidos por ellas mismas, a la vez que se promueve el consumo responsable y un sistema alimentario sostenible.
Además del impacto en las personas en tratamiento de drogodependencias, el proyecto tiene una vertiente comunitaria a través de la cual busca abrirse al barrio y colaborar con las vecinas. El Jardín puede servir de espacio de intercambio y uso para entidades y personas del distrito que necesitan reunirse o hacer actividades al aire libre, un lugar de encuentros familiares de personas en tratamiento o un punto de visita para escuelas o proyectos de ocio que quieran saber más sobre la agroecología social. También se instalará un punto de información sobre ecología alimentaría abierta al distrito. Así, se trabajará para romper prejuicios y estigmas que a menudo rodean a las personas con problemáticas relacionadas con las adicciones de sustancias.
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